El Taekwondo, como la mayoría de las Artes Marciales, tiene distintos niveles, representados por nueve grados básicos o Gup, simbolizados por cinturones de colores, y nueve grados avanzados o Danes , simbolizados por el cinturón negro.

Para llegar a los grados más altos , como el noveno Dan, se requiere, por lo menos cuarenta años de práctica y un mínimo de edad de cincuenta y dos años.

Para subir de grado es necesario rendir un examen.

Se realizan aproximadamente tres al año, con una separación de tres meses y medio entre cada uno de ellos. Estos exámenes son tomados por uno o más maestros con un grado de 4° dan o superior y acreditados por la Federación Chilena de Taekwondo.

Los alumnos que aprueban reciben un certificado extendido por la federación, en el que se acredita el grado obtenido. Para tener derecho a ser presentado a examen por su profesor, el alumno debe tener un 75 % de asistencia como mínimo, además de tener el nivel técnico correspondiente al grado al que postula y un comportamiento adecuado a un practicante de Taekwondo.

El trayecto transcurrido entre el “cinturón blanco y el “cinturón negro” solo representa un proceso de preparación del practicante de Taekwondo, pero solo al llegar a “cinturón negro” es capaz de empezar a recorrer el camino para aprender a disfrutarlo.

El “cinturón negro” es también, símbolo de habilidad y madurez. La obtención de dicho grado, consiste en saber aceptar y ejercer una gran responsabilidad para sí mismo como practicante y para con la sociedad en la que vive. Ambas características siempre van juntas, y deben ser inseparables.